Los retos de los departamentos, municipios y resguardos indígenas de cara al acto legislativo 03 de 2024.
Empezamos el 2025, con la entrada en vigencia de la reforma constitucional que fortalece el modelo de descentralización creado por la Carta Política de 1991. El acto legislativo 03 de 2024, que modificó el Sistema General de Participaciones SGP fue publicado en diario oficial el 27 de diciembre de 2024, por lo que entró regir. Es sin duda la reforma mas importante en materia de descentralización desde que fue expedida la Constitución Política de 1991, la cual aspira materializar el espíritu del constituyente de reconocer a Colombia como un país de regiones y darles autonomía a los territorios para la gestión de sus asuntos propios. Para tal cometido la carta política dispuso que el 46% de los Ingresos Corrientes de la Nación ICN, constituidos por los ingresos tributarios y no tributarios con excepción de los recursos de capital, serán transferido a las entidades territoriales ET. Dos reformas constitucionales (Actos Legislativos 01 de 2001 y 04 de 2007) le dieron un raponazo al monto de los recursos transferidos. Esto se evidencia con el hecho que a 2023, el SGP representó apenas el 23,5% de los ICN, lo que significó para las ET la perdida de alrededor de 300 billones de pesos, afectando significativamente la autonomía territorial y conduciendo el país a un proceso de recentralización. Ahora, por iniciativa de congresistas y con el aval del actual Gobierno Nacional, fue aprobado el acto legislativo 03 de 2024, que dispone que se llevará el monto de los recursos del SGP al 39,5% de los ICN, en un periodo de 12 años a partir del 2027 y condicionado a la expedición de una ley de competencias, la cual debe presentar el Gobierno Nacional al Congreso de la República en un plazo de 12 meses a partir de la promulgación del Acto Legislativo. En cifras, las entidades territoriales pasarán de recibir, de 83 billones en 2025, a unos 163 billones en 2032, lo que significa grandes retos para los departamentos, municipios y resguardos indígenas que verán duplicarse sus transferencias desde la nación y tendrán que asumir más funciones y competencias a la par con los mayores recursos. El primer reto que tienen las Entidades Territoriales ET es la eficiente ejecución de estos recursos, de tal manera que no queden en balances. Y lo señalamos como reto, porque en 2023, por ejemplo, los recursos de libre destinación de la asignación de propósito general, tuvieron una ejecución del 87%. Y la Asignación Espacial para Resguardos Indígenas tuvo una ejecución del 66%. No hay derecho que con necesidades básicas insatisfecha de la población indígena, los Municipios y Resguardos Certificados no ejecuten eficientemente estos recursos y queden en saldos de balances. Ante el hecho que se duplicarán estos recursos, se requiere que se fortalezcan las capacidades para la correcta ejecución de la inversión, si no, la reforma será un gran riesgo. Un segundo reto, es la generación de ingresos propios y disminuir la dependencia de las transferencias nacionales. Diferentes estudios han mostrado que existe evidencia de la “pereza fiscal” que muchas entidades territoriales caen al tener mayores transferencias. Ejemplo de esto son muchos municipios que reciben regalías directas y tiene los niveles de recaudo tributario mas bajos. Casi el 90% de los municipios del país son de categoría 6 y la gran mayoría de estos depende de las transferencias nacionales para su funcionamiento, sin que se evidencia mayores esfuerzos por generar recaudo propio. Ejemplo de esto es que la mayoría de municipios no han adoptado instrumentos como la participación de plusvalía que establece la ley 388 de 1997, para que el Ente Territorial participe en el mayor valor de la tierra generado por las decisiones urbanísticas, permitiendo el enriquecimiento de terratenientes mientras el fisco local no tiene con que pavimentar ni una calle. Con la llegada de mayores recursos vía transferencias nacionales, existe el riesgo que muchos Entes Territoriales caigan o se afiancen en la “pereza fiscal” de no hacer esfuerzo para la generación de recursos propios. Por lo tanto, el reto se encuentra en fortalecimiento de las capacidades de recaudo fiscal, para optimizar los ingresos propios y no depender mayoritariamente las transferencias. ¡Ahí está la autonomía! Este año se discutirá la ley de competencias y podría condicionarse la transferencias de competencias y recursos a que se demuestre la capacidad para su manejo, por lo que las ET deben comenzar desde ya a fortalecer sus capacidades institucionales de cara al incremento de los recursos. En Impuestos y Territorio estamos listos para asistir a departamentos, municipios y resguardos indígenas, a prepararse para la implementación de la reforma que ya entró en vigencia. Fortalezcamos la descentralización fiscal.